Cuanto más nos esforcemos, más creceremos
Puede que estés familiarizado con el término estirar la vida, que solemos interpretar como vivir más. Sin embargo, los ángeles lo definen de otra manera. Para ellos, nuestra vida se alarga en la medida en que estamos dispuestos a acercarnos a los demás. Muchas veces no es fácil, sobre todo cuando nos estancamos y nos da la sensación de que bastante tenemos con seguir adelante. Hay veces en que necesitamos levantar barreras protectoras que nos permitan mantener la cordura y el equilibrio, pero también hay otras en las que no nos haría daño salirnos un poco del camino para dar nuestra ayuda a quien nos lo pide o a quien es demasiado vergonzoso o demasiado orgulloso para pedirla; o simplemente estar al alcance de los que nos necesitan, sin juzgarlos ni esperar nada a cambio. A veces, para “estirarse”, para crecer, hay que hacer un verdadero esfuerzo, como volver a casa para cuidar de un familiar enfermo o abandonar nuestros sueños para que nuestros hijos puedan realizar los suyos. Cuanto más generosa y sabiamente crezcamos, más cerca estaremos de los ángeles y de convertirnos en ángeles.
¿De qué manera te has “alargado” hacia los demás? ¿Y cómo lo han hecho los demás hacia ti? ¿Te resulta duro hacerlo? ¿Y no hacerlo? ¿Cómo ha enriquecido tu vida y la de los demás? ¿Cómo podrías “alargarte” en este momento hacia quien pueda necesitarte?
Meditación de los ángeles:
Amplío constantemente mi capacidad de dar.
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