¿Cómo reconocerla?
El saber con claridad que estamos frente a la persona que tanto hemos esperado es algo que sólo nuestro corazón nos dirá, por lo que únicamente debemos de escucharlo a él
Pero tenemos que saber que todos podemos tener enamoramientos, atracción o asimilamiento de energías y, como nuestra mente es demasiado hábil, con una sensación de paz o algo confortable el cerebro nos puede mandar muchas órdenes o reflejos que nos hagan sentir que realmente esa persona es nuestra alma gemela, aunque NO lo sea.
En cambio, cuando realmente estamos vecinos al verdadero amor, se experimenta una reacción que nunca hemos sentido con nadie.
Algunos de los síntomas son que nos podemos sentir incómodos, extraños, ya que estamos dando pie a una vibración demasiado alta, por lo que al mismo tiempo experimentamos una sensación muy especial.
Todo esto puede pasar aun cuando no hayamos visto a esa persona, razón por la cual siempre debemos de indagar a qué se deben nuestros momentos de inquietud y si vemos a alguien que nos llame la atención, entonces es hora de acercarnos.
Sobre todo porque, tristemente, hay gente que no ha logrado asimilar esa energía y no han querido investigar qué es lo que ha sentido, dejando ir a su alma gemela sin haberla olvidado nunca, todo porque no sabía que tenía que provocarse un encuentro.
Es importante estar atento ante estas emociones, porque podemos sentirnos muy atraídos hacia alguien, pero siempre será el mismo tipo de enamoramiento; eso quiere decir que es un sentimiento conocido y que no es la persona adecuada.
La clave es que con el verdadero amor todo sentimiento será muy DIFERENTE a los que hayamos experimentado antes.
Desde la creación
El querer entender por qué de una sola alma surgieron dos seres, es como querer comprender cómo fue la creación del universo.
Esto es algo que tu corazón entiende muy bien y lo asimila perfectamente, pero que quizá es difícil que la mente capte.
Los Maestros lo explican así: cuando fuimos creados éramos una sola energía pura que fue generando una nueva energía dentro de ella, en lo más profundo y puro de su centro, su corazón. Pero para hacerlo tuvo que dividirlo y convertirse en dos seres con diferentes personalidades.
Es por eso que se trata de una misma energía que por una necesidad de amor, de tener su otra parte similar que le diera todo el cobijo que como almas necesitamos, decidió dividirse.
Cada uno de esos seres se fue por diferentes caminos de evolución, hasta que, llegado el momento, se volviera a encontrar con su otra mitad, con su alma gemela, para no separarse jamás.
gracias por tú blog, que difcil es encontrar tu alma gemela, aunque no la encuentre la seguiré buscando, pues el solo hecho de buscarla me da felicidad.
ResponderBorrarcomo dice Eros en una canción, "donde estarás alma gemela que yo sin ti me perderé"
saludos, javier